De las 231 medidas, 60% se han ejecutado totalmente y el 30% se están llevando a cabo

Por primera vez desde el año 2010, la capital ha reducido sus emisiones cumpliendo con los umbrales de óxido de nitrógeno NO2 que establece la Directiva europea de calidad del aire

Estas medidas han sido imprescindibles y necesarias para avanzar hacia la sostenibilidad ambiental en la capital

Madrid ha sabido liderar durante estos últimos tres años un conjunto de acciones para reducir las emisiones contaminantes en la capital. Se trata de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360, una herramienta con 231 medidas (60% se han ejecutado en su totalidad y 30% están en curso) con las que se ha logrado un hito histórico: por primera vez desde el año 2010, la capital ha reducido sus emisiones cumpliendo con los umbrales de óxido de nitrógeno NO2 que establece la directiva europea.

Esto se traduce en que las 24 estaciones medidoras de la calidad del aire que hay en la capital presenten los niveles de NO2 más bajos desde que se aplica la normativa comunitaria en 2018. Además, 2022 ha sido el primer año en el que no ha sido necesario activar el protocolo anticontaminación por altos niveles de NO2.

¿Cuáles son las medidas implantadas?

Las 231 medidas de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 tienen el mismo fin, pero diferentes ámbitos de actuación. En primer lugar, ha sido fundamental sentar las bases con una normativa sólida. Para ello, desde que en marzo de 2021 se creó la Ordenanza de Calidad del Aire y Sostenibilidad (OCAS), se ha ido aprobando otros textos como la Hoja de Ruta Neutralidad Climática; la Ordenanza de Movilidad Sostenible (OMS); la Ordenanza Reguladora del Taxi; la de Limpieza de Espacios Públicos, Gestión de Residuos y Economía Circular; el Plan de Movilidad Sostenible Madrid 360, y la Estrategia en la Distribución Urbana de Mercancías (DUM).

Cada normativa ha permitido al Ayuntamiento implantar acciones concretas como la eliminación total de las calderas de carbón en 2022, que ha supuesto reducir la emisión de 57 toneladas al año de NO2; la obligación de crear infraestructuras de recarga para vehículos eléctricos en las nuevas edificaciones y que los eventos multitudinarios se sustenten en una memoria de sostenibilidad ambiental; también la disminución los gases de efecto invernadero en un 65% (objetivo a 2030 desde el año 1990) con la hoja de ruta.

Cada acción es un grano de arena imprescindible y necesario para alcanzar este hito. En su caso, la OMS permite al Ayuntamiento avanzar para que la totalidad de la capital sea una Zona de Bajas Emisiones en 2024, siendo su punto de inicio la creación de las Zonas de Bajas Emisiones de Especial Protección de Centro y Plaza Elíptica para que los vehículos más contaminantes no puedan acceder. Con estas ZBEDEP, se ha logrado reducir los valores de NO2 en un 13,4% en la M-30, un 31,15% en Centro, y un 24,9% en Plaza Elíptica.

Madrid, una flota de autobuses 100% limpia

Los madrileños han sabido adaptarse a los cambios por mejorar la calidad del aire de la capital y el Ayuntamiento ha sido el principal acicate con su ejemplo. En este sentido, el transporte público también ha experimentado profundos cambios. La Empresa Municipal de Transportes (EMT) renovó en un 62% su flota adquiriendo 1.219 nuevos autobuses limpios. Ya no hay autobuses diésel en la capital, siendo la primera ciudad europea con una flota 100% limpia y con 19 líneas 100% eléctricas. Se crearon 8 líneas Cero y se han realizado 36 jornadas de gratuidad de los autobuses para estimular su uso entre los madrileños. En términos medioambientales estas medidas han supuesto un descenso del 60,3% de las emisiones del transporte público municipal (120 toneladas de NO2 anuales).

BiciMAD también experimentó una importante transformación con su ampliación en 90 estaciones. Además, se espera que este año crezca hasta las 611 estaciones y 7.500 bicicletas. Dado que esta medida no tendría lógica sin infraestructuras, se han creado nuevos carriles bici, siendo el más importante el de Castellana, de 13 kilómetros, cuyas obras concluirán en marzo.

En lo referente también a infraestructuras, la remodelación del Nudo Norte ha sido una de las grandes obras del mandato ayudando a reducir 14 toneladas diarias de CO2 a la atmósfera. De similar parangón ha sido la cubrición del Mahou-Calderón que ha dado fin al proyecto Madrid Río.

Otras infraestructuras de calado para alcanzar mayor sostenibilidad han sido las de electrificación, multiplicándose por tres los puntos de recarga rápida en espacios públicos (hay 284 puntos distribuidos por toda la ciudad).

El ejemplo municipal también se ha traducido en el aumento de un 27% de la energía solar para edificios municipales, o en la ampliación de la Planta de Tratamiento de Biometano de Valdemingómez incrementando su capacidad en un 80% (equivalente al gas necesario para abastecer a 20.000 hogares).

La climatización eficiente también encontró un aliado en la iniciativa Madrid 360 Solar para promover el autoconsumo energético y la generación de electricidad a través del sol.

La aplicación de la tecnología en pro de la sostenibilidad también ha servicio para digitalizar la Distribución Urbana de Mercancías con el fin ofrecer agilidad al servicio a la vez que se reduce la contaminación pues se evitan los recorridos de estos vehículos buscando sitio donde estacionar.

Ayudas para comprometerse con la calidad del aire

La implantación de estas medidas requirió no solo del ejemplo municipal sino también de refuerzo económico de 111,5 millones de euros para familias y empresas madrileñas.

Para ello se lanzó el Plan de Ayudas Cambia 360 que permitió que los vehículos CERO emisiones se hayan multiplicado por 11 en el sector del taxi pasando de los 7.709 con clasificación ECO de 2019 a los 11.863 en 2022. Se ha logrado, por tanto, que el 75 % de los taxis que circulan por la capital sean de bajas o nulas emisiones.

¡Madrid 360 funciona!