Data de 1396 y puede admirarse en la pradera próxima a la Puerta del Ángel Caído

Hay multitud de razones para disfrutar de El Retiro, y desde la semana pasada una más: el parque tiene un nuevo inquilino de 627 años. Se trata de un olivo que data de 1396 y que se ha convertido en el árbol más longevo del lugar desplazando al histórico ahuehuete que se ubica en la entrada del jardín por la puerta de Felipe IV.

Su porte no deja indiferente a nadie. Pese a no ser el árbol más grande de El Retiro, sus cinco toneladas de peso repartidas en 3 metros de alto y otros 3 de diámetro son dignas de admiración. Más teniendo en cuenta que el olivo es una especie de crecimiento lento y no llega a alcanzar los 10 metros de altura.

Este anciano, que proviene de un vivero del municipio madrileño de Carabaña, mora ahora en las praderas próximas a la Puerta del Ángel Caído. Se ha emplazado en el parque tras la adhesión del Ayuntamiento a la iniciativa ‘Un árbol por Europa’ impulsada por la asociación juvenil Equipo Europa, que cuenta con el apoyo de la Oficina del Parlamento Europeo en España, y cuyo objetivo es lograr que todos los municipios españoles planten al menos un árbol como símbolo de su compromiso con la sostenibilidad local y la lucha contra la deforestación en Europa.

¿Y por qué un olivo?

Lo olivos y El Retiro tienen una estrecha relación desde antaño. Ya en el plano de Texeira de 1656 se plasmaba la presencia del Olivar de Atocha alrededor de la actual basílica que permitía a los reyes entrar directamente desde El Retiro al olivar y a la Virgen de Atocha. De hecho, los olivos tienen aún una importante presencia en el parque y se pueden contemplar en la zona del Antiguo Reservado, en los Jardines de Cecilio Rodríguez y en la Montaña Artificial.

Además, el olivo es una especie típica mediterránea – una de las especies más demandas en ornamentación y jardinería- que puede soportar heladas de hasta 10 grados bajo cero. También cuenta con una gran capacidad de regeneración.

Para los amantes de esta especie, también pueden admirar otros ejemplares ornamentales que hay en la capital como el olivo de la plaza de Colón, en plaza de España o en el Palacio de la Moncloa.