23 agosto 2023
La rehabilitación de la Montaña de Gatos de El Retiro permite visitas tras dos décadas cerrada
El Ayuntamiento ha recuperado esta joya arquitectónica para la ciudad tras una intervención en el interior y el exterior de este cerro de Fernando VII
Galerias abovedadas en su interior coronadas por un oráculo de luz cenital y un exterior bucólico con cascadas, estanques y senderos completan este conjunto paisajístico
Durante las obras se ha hayado un viaje de agua que podrá contemplarse a través de una pantalla de cristal
Madrid ha recuperado para madrileños y turistas una joya arquitectónica de la capital del siglo XIX en los Jardines del Buen Retiro, integrado en el Paisaje de la Luz y declarado Patrimonio Mundial de la Humanidad. Se trata de la Montaña de Gatos, cerrada en su interior y vallada en su exterior desde hace dos décadas por desprendimientos y humedades que impedían que este tesoro fuera visitado.
La Montaña de Gatos toma su nombre por las colonias de felinos errantes que lo habitaban. Fue un capricho que el rey Fernando VII promovió en 1817 para uso y disfrute de la realeza y sin acceso al público general. Esta bella montaña artificial se ubica en la esquina noroeste de El Retiro y se accede a ella a través de la puerta de O`Donell.
En su parte interior, muy deteriorada por las filtraciones de agua, se ha recuperado el espacio abovedado de planta circular coronado por un óculo que ofrece una luz cenital al espacio. También las galerías laterales que discurren por el interior de la montaña: la principal, que hace las veces de acceso, y las otras tres que avanzan bajo la montaña buscando la caída del agua de las cascadas exteriores.
En su exterior, discurren por el cerro senderos perimetrados por estanques que vuelcan sus aguas en tres cascadas artificiales y láminas de agua rodeadas por patrimonio vegetal y zonas ajardinadas. El acceso por estos caminos permite coronar la montaña y disfrutar de una extensa visión del parque de El Retiro en su conjunto pero también del interior de la zona abovedada a través de una cúpula de cristal.
A sus pies, la ría y el estanque logran que el espacio sea aún más bucólico y la escultura de un león porta sobriedad al conjunto paisajístico.
Próxima a la Montaña de los Gatos se erije la Casita del Pescador, obra del arquitecto Berogán que también construyó en El Retiro edificaciones como la Casa del Contrabandista, la Casa del Pobre, la Casa Rústica, la Pajarera, las Casa de Fieras, y el embarcadero del Estanque Grande.
Hallazgos arqueológicos
La intervención para recuperar la montaña, realizada por el Ayuntamiento durante 8 meses y que ha supuesto una inversión de 2,1 millones de euros, ha sacado a la luz un tesoro arqueológico de relevancia y que queda a la vista de los visitantes a través de una pantalla acristalada. Se trata de un viaje de agua que conducía a una noria datada antes de la construcción del propio parque y que se suma a otros viajes de agua descubiertos en la capital que se utilizaron hasta medidados del siglo XIX para su distribución por galerías subterráneas.
Espacio para exposiciones
La recuperación para Madrid de esta joya arquitectónica también ha permitido recobrar un nuevo espacio expositivo para la ciudad en el interior abovedado actualmente ocupada por una exposición temporal para conocer la historia de la Montaña de los Gatos. La muestra, para aquellos que deseen conocerla y visitar el espacio, se encuentra abierta de 11:00 a 13:00 h y de 18:00 a 20:00 h.